jueves, 6 de junio de 2019

Artículo (2ª entrega)

El curso se acaba, y con él, la asignatura de Didáctica de la Lengua que nos ha acompañado a lo largo de estos meses y con la que hemos aprendido a motivar a los niños a la ora de comunicarse de manera oral, a comprender correctamente un texto llevándo a cabo actividades que también realizan los profesores de los colegios de La Salle, a cómo animar a un alumno para que mejore su letra, así como su ortografía y semántica y, a saber explicar a nuestros alumnos de manera correcta cómo se elabora un análisis morfosintáctico.

Por ello, ¿qué mejor forma de despedirnos de esta asignatura que realizando una síntesis en la cual, podamos plasmar todo lo que hemos podido aprender en ella?

BLOQUE 1: Lenguaje, lengua y comunicación oral

En este bloque, vimos el lenguaje, la lengua y la comunicación oral y, para poder conocerlos correctamente, comenzamos por sus significados. El lenguaje es la base de todos los conocimientos. La capacidad del ser humano para comunicarse a través de las lenguas. El lenguaje también nos permite pensar, es el soporte básico de la memoria, el medio de expresión más extenso y, por último, permite la autoexpresión.
En cuanto a la lengua, esta es el sistema de comunicación y expresión verbal propio de un pueblo o nación; o común en varios.


Las señales y los símbolos también son parte del lenguaje, puesto que, una señal es un objeto que nos aporta información, y además, pueden ser de tres tipos:

  • Índices, indicios o síntomas: transmiten información a todos los seres humanos y basta con la experiencia para interpretar su valor como señales. Ejemplo de ello puede ser él humo, síntoma de que puede haber un fuego.
  • Iconos: son imágenes que guardan cierto parecido con aquello que señala. Por ejemplo el inono de baño que nos encontramos en los restaurantes.
  • Símbolo o signo: Al signo se le aporta un significado que nos transmite algo. Por ejemplo, los colores del semáforo.

Tras recordar esto, también pudimos ver que, el bloque, nos hablaba de las diversas maneras que los seres humanos tenemos de comunicarnos. Sin embargo, la manera de expresión propia del ser humano en la cual más nos centramos, fue en la expresión oral, y de ella realizamos la actividad, ya que, uno de los objetivos de la Educación Primaria es conseguir que el alumno sea un buen hablante ideal. Este hablante ideal se puede definir como "alguien que es un buen emisor de cuantos signos puedan ser utilizados para transmitir información y que puedan ser interpretados por un receptor al que ha de tener muy en cuenta (Jesús Ramírez Martínez, Textos Educativos 5, 2002)".



Tras conocer la existencia de un hablante ideal, pudimos ver la diferencia entre oír y escuchar, puesto que muchas personas piensan que tienen el mismo significado pero hay grandes diferencias, ya que, oír es percibir las vibraciones del sonido, mientras que escuchar es la capacidad de atender el mensaje que se nos transmite, pero, además, podemos indicar más diferencias como pueden ser: 
  • Escuchar pertenece al orden interpretativo del lenguaje. Oír se incluye en el territorio fisiológico.
  • Escuchar implica interpretar el lenguaje dando significado al sonido. Oír significa percibir el sonido.
  • Podemos dejar de escuchar cuando queramos pero no podemos dejar de oír.
  • Escuchar implica la realización de un esfuerzo físico y mental y para oír no es necesario ningún esfuerzo.
Tras esto, conocimos las estrategias de la comunicación oral para que nuestros alumnos consigan serlo:
  • Crear un contexto lingüístico estimulante y motivador.
  • Hablar sin provocar respuestas estándar.
  • Repetir correctamente el mensaje, sin corregir al alumno.
  • No llamar la atención en el grupo sobre el posible retraso o trastorno.
  • Formar un clima de confianza.
  • Proporcionar situaciones de diálogo.
  • Buscar estímulos interesantes.
  • Hacer preguntas breves que permitan respuestas largas.
  • Diversificar temas de conversación.
  • Respetar el turno de palabra o la expresión espontánea del grupo.
  • Adiestrar al niño en el uso de la lengua oral.
  • Crear múltiples situaciones comunicativas.
  • Mediar ante el niño para que pase de un comportamiento lingüístico espontáneo al comportamiento lingüístico corporal.
    En este bloque pudimos aprender a cómo trabajar el desarrollo oral de los niños de primaria y, para ello, debemos ayudarles a desarrollar las diferentes estrategias de una manera adecuada. 
    Hay diferentes maneras en las que podemos ayudarles a trabajar el desarrollo oral, como por ejemplo, a través de debates o diálogos en gran grupo de temas que a ellos les puedan interesar y de los que quieran hablar y participar, así como diálogos en pequeño grupo o exposiciones individuales de temas que les gusten y les haga ilución presentárselo a sus compañeros.
    En estos casos, nos encontraremos siempre en el aula niños de todo tipo, desde aquellos que hablan sin parar, hasta los que no realizan ninguna intervención en la conversación, por ello, debemos estar atentos a todos nuestros alumnos y saber cómo intervenir con cada uno de ellos; en el caso de niños que hablan sin parar, podemos utilizar estrategias como la de ponerles un tiempo determinado para hablar, pedirle que pregunte la opinión a otros compañeros, etc. Y en el caso del niño que apenas participa, podemos irle incluyendo poco a poco en el debate, preguntándole, junto con otros compañeros su opinión sobre el tema o su opinión sobre los comentarios de los compañeros.

    Para realizar la actividad de este bloque, me base en mi experiencia en las prácticas y pensé en temas que les gustaban a esas edades y recordé también la actitud de algunos de ellos ante las exposiciones o ante los debates, niños que apenas hablaban o que hablaban sin parar y cómo lo intentaba poner solución el profesor o cómo hubiese estado bien actuar para animarles.

    BLOQUE 2: La lectura


    ¿Qué es leer? Leer es interpretar, es comprender, es relacionar, es tomar partido. Leer es aprender, analizar, reflexionar y adquirir valores fundamentales. Para poder realizar esto, es necesario que se conozca la competencia lectora y se trabaje y desarrolle de manera correcta, ya que, sin la lectura, no podremos conocer datos, formar pensamiento u opinión, recabar información, despejar dudas, etc.

    Por ello, este bloque, vimos el cómo debemos tratar el tema de la lectura en nuestras aulas. Aunque la lectura se trabaje mucho en la etapa de Primaria, esto no quiere decir que la manera de trabajarlo sea la correcta, puesto que, cuando un niño lee mal, se le suele decir que tiene que leer más, sin embargo, en ese caso, le reforzaremos aún más los malos vicios que tenga leyendo, en vez de corregírselos.


    Un punto muy importante de la lectura, es la comprensión, puesto que, sin comprensión, no existirá la lectura. Pero para que exista comprensión, es necesario saber descodificiar lo que los ojos ven.

    Es importante que enseñemos a nuestros alumnos cómo se debe leer, pero para ello, debemos cambiar la manera que tenemos de acostumbrar a sus cerebros, ya que, les acostumbramos a descodificar cuando, realmente, deberíamos enseñarles a comprender.



    Dentro de la lectura, nos encontramos dos tipos diferentes: la lectura silenciosa y la lectura en voz alta.



    En cuanto a la lectura silenciosa, esta sirve para comprender. En este tipo, solo utilizamos la vista y leemos por fijaciones. El objetivo que perseguiremos será el de ampliar el campo visual para poder reducir el número de fijaciones.

    Hay dos formas de visión: la visión directa, que captan signos de las palabras o del conjunto; y la indirecta, la cual capta la relación de ciertas letras con las demás. 
    Para mejorar la lectura silenciosa, debemos trabajar con nuestros alumnos la anticipación ocular y, para ello, podemos mostrarles textos en los que falten algunas letras, sílabas, otros textos en los que tengan que recuperar la palabra anterior para darle sentido al texto, que falten palabras, etc.

    En cuanto a la lectura en voz alta, sirve para que otros comprendan, es una lectura expresiva y el objetivo es hacer llegar a los otros un mensaje. En este caso, es más lenta, ya que leemos todas las palabras.
    La manera correcta de leer en voz alta es la siguiente:
    1. Dejar que los niños se preparen la lectura previamente en sus casas.
    2. Ayudarles con posibles dudas que puedan tener.
    3. Darles ítems para que sepan cómo entrenar.
    4. Cuando el niño lea en clase en voz alta el texto previamente preparado, evitaremos corregirle en voz alta, ya que podemos provocarle frustración.
    5. A los demás alumnos, les animaremos a escuchar y prestar atención, puesto que después les realizaremos algunas preguntas. Así fomentaremos la escucha activa.
    6. Tras esto, podemos animar a los niños a que lean, de manera silenciosa, el mismo texto, a subrayar lo que más hayan destacado y así ver que consideran unos importante y qué no.
    Para que mejoren su lectura en voz alta, podemos mandarles ejercicios de lectura en los que tengan que cambiar el volumen de la voz, leer más fuerte aquellas palabras destacadas, etc.

    Todo esto es gracias a unos acuerdos internacionales que hubo hace 10 años en materia de competencia lectora, en los que se elaboraron los informes PIRLS (para niños de 8- 9 años) y PISA (12 años). En estos informesse trabaja la competencia lectora, nos ayudan a ver qué métodos son los que dan mejores respuestas y, a su vez, han dado lugar a evaluaciones nacionales. Otro acuerdo fue el del marco de las lenguas, cuyos criterios son iguales en todos los países, sus niveles de competencia van del A1 al C2 y establece que la lectura silenciosa es para comprender y la de voz alta para transmitir.

    En este bloque pudimos aprrender a cómo ayudar a nuestros alumnos a desarrollar la lectura, ya sea oral o silenciosa; ya que, cuando un niño no lee bien o no comprende lo que lee, la solución no es decirle que lea más, sino darle las estrategias adecuadas para que desarrolle tanto la capacidad lectora como la capacidad de comprensión.
    Para ponerlo en práctica desarrollamos una actividad que se está llevanodo a cabo en colegios de La Salle, en la cual, a partir de un texto, ya sea continuo o discontinuo, el alumno tiene que responder a una serie de cuestiones para asegurar su comprensión y su atención.
    Considero que este tipo de actividades son muy necesarias ya que, como he visto a lo largo de estos dos años en las prácticas, muchos niños no comprenden aquello que leen y esto, les repercute en los estudios, por ello, tenemos que dar la importancia que se merece a este tipo de actividades.


    BLOQUE 3: La escritura

    En este bloque, hemos profundizado acerca de la escritura en el aula y su manera de enseñarla en esta. 

    La escritura se podría definir como el proceso por el que se pasa de la posesión interna de un concepto, idea o pensamiento a la transformación de este mediante una codificación de símbolos con intención comunicativa.
    Debemos distinguir entre la grafomotricidad y la caligrafía. La grafomotricidad se define como el control motor asociado a la grafía, la cual implica direccionalidad, tono muscular, coordinación visomotora y ubicación espacial. La caligrafía se puede definir como una proyección de la grafomotricidad.

    Cuando hablamos de aprendizaje de la escritura, debemos tener en cuenta las diferentes metodologías existentes, las cuales, algunas atienden más al desarrollo grafomotriz, mientras que otras buscan la funcionalidad y la significatividad del proceso poniendo a los niños en situación de escribir para comunicar.
    Los métodos que nos encontramos son:
    • Método de base sintética: los cuales trabajan de la síntesis al análisis, es decir, de las partes más pequeñas a las partes mayores por medio de la composición. Primero estudian las letras o fonemas asociados a un dibujo y trazan de manera repetitiva este grafema para incorporarlo; después de esto, copian la combinación de letras para formar sílabas y después, copian las palabras las cuales forman con las sílabas aprendidas hasta que, al final, unen esas palabras conocidas hasta formar sintagmas.
    • Métodos de base analítica: parten de los elementos significativos de la lengua. A su vez, el acercamiento a la escritura pasa por dos fases diferenciadas: el descubrimiento y reconocimiento de la grafía (a través del tono muscular y de las sensaciones visualies y táctiles), y la automatización de la grafía (lograr el hábito que hace innecesario el reconocimiento en cada momento).
    • Métodos de base constructivista: lectura y escritura están relacionadas y no existe un conocimiento previo al código por lo que no se trabajan actividades previas  de desarrollo grafomotriz ni de trazado de grafías.
    Entre los 3 y los 8 años el niño utiliza cuatro tipos de estrategia que se pueden ir relacionando con las diferentes edades, aunque hay que tener en cuenta que no todos los niños se desarrolan de la misma manera:
    • Estrategia pictográfica: se produce más o menos a los 3 años. En esta etapa el niño va adquiriendo la relación entre lenguaje oral y escrito y descubre cómo las personas utilizan las palabras y se comunican.
    • Estrategia logográfica: se produce más o menos a los 4 años. Aprovecha que las palabras son percibidas como dibujos, con esto pretendemos que conozcan sus formas y sus significados apoyándonos en imágenes.
    • Estructura alfabética: se produce más o menos a los 5 años. Emplea la regla de correspondencia fonema- grafema. Conoce los signos gráficos para representar sonidos y articularlos.
    • Estrategia ortográfica: se produce alrededor de los 6 años en adelante. Automatiza todo el proceso anterior.
    Una vez que ha se han entrenado en la escritura manuscrita, deben trabajar algunos aspectos como la postura, la disposición del papel, el movimiento gráfico, la velocidad, el ritmo, etc. Estos aspectos son necesario trabajarlos ya que suponen una carta de presentación sobre nosotros, ya que, una letra personal, legible y clara puede mostrar que es una persona ordenada, cuidadosa y responsable de su trabajo.

    En cuanto al desarrollo de la expresión escrita, tenemos que saber cómo enseñar a los niños a redactar y, para ello, debemos tener en cuenta que redactar significa poner un texto por escrito con coherencia y cohesión, pero esto no significa que tenga que tener una tipología determinada. Dependiendo de lo que queramos pedir, debemos usar unos términos concretos u otros, además así, los niños pueden aprender vocabulario lingüístico y literario (cuento, narración, descripción, argumentación...).
    La manera correcta de redactar es la siguiente:
    1. Anotar ideas que van surgiendo.
    2. Ordenar las ideas, teniendo en cuenta la estructura de planteamiento, nudo y desenlace.
    3. Tras estructurarlo, realizarán una primera escritura que será un borrador.
    4. Primera revisión donde se corregirán errores de puntuación, expresión, acentuación...
    5. Se realizarán las correcciones oportunas.
    6. Se pasará a limpio la redacción.
    De esta manera nos aseguramos de que el trabajo tenga calidad y esté expresado de una manera correcta.
    Cuando el profesor se lleve dicha redacción, realizará anotaciones sobre algunas cosas que detecte para que el alumno las tenga en cuenta. En el caso de que tenga faltas de ortografía, se le puede aplicar la técnica de boli verde, boli rojo, mediante el cual, por cada cículo rojo que se le ponga (falta de ortografía), se le tendrá que poner otro verde (cosas positivas, palabras difíciles bien escritas...)


    Además, lo mejor para todas las redacciones, es que el profesor le de un ejemplo de aquello que tiene que elaborar, así nos aseguraremos de que el alumno tiene una idea de qué es lo que s ele pide.

    En este bloque aprendimos un tema muy importante como es el de la escritura, y cómo motivar a alumnos de distintas edades para que quieran mejorar su letra y hacerla más legible. Para ello, primero hay que buscar un tema que al alumno le guste para que así quiera escribir sobre ello y, a continuación, hay que buscar un tipo de letra adecuado para que el niño la copie así como unos materiales que le ayuden en esta tarea.
    Es importante que los niños no se sientan menos listos o peores a sus compañeros, por ello es bueno que lo vean como una tarea importante y que entiendan el porqué están haciendolo.
    Es bueno que sepamos qué tipo de actividades vienen mejor a nuestros alumnos y no limitarnos a entregarles un cuadenillo Rubio para que practiquen. En las prácticas tuve que corregir varias redacciones y exámenes de los alumnos y muchos de ellos no tenían una buena letra, pero por ello no tenemos que echarle la culpa al niño, sino a los maestros que ha tenido, los cuales no se han implicado con él para ayudarle a mejorar su letra.


    BLOQUE 4: Ortografía y semántica

    En este bloque hemos tratado dos puntos importantes de la lengua, los cuales están íntimamente relacionados con la expresión y la comprensión: el vocabulario y la semántica.



    Según Irune en los apuntes de Didáctica de la Lengua, "la ortografía es el conjunto de normas que rigen la representación escrita, código gráfico de la lengua." A la hora de escribir correctamente, el niño se puede encontrar con diversos problemas, ya sea en las grafías o en la ortografía de la palabra (acentuación, mayúsculas, ortografía, palabras compuestas, etc.), o en la ortografía de la frase (separación de sílabas, mayúscula al inicio, puntuación...).
    Es importante saber que, las bases fundamentales que hay para trabajar la ortografía son: la atención, la memoria visual y el uso funcional de la esritura; además de una buena motivación.

    Según podemos leer en los apuntees de Didáctica de la Lengua, "Noam Chomsky, en sus estudios sobre la relación entre lo que pensamos y lo que decimos, demostró que, cuando escribimos, el primer paso es pensar lo que queremos decir, en segundo, organizar esos significados en significantes gramaticalmente correctos, el tercero, en atraer la representación visual de la palabra y, el cuarto, en representarla por procesos motores".


    La forma más tradicional de desarrollar la ortografía es el dictado, además, también se suele usar tanto para evaluar como para calificar la ortografía. Esto suele hacerse tras la explicación de alguna regla nueva.


    Tener buena ortografía favorece la ruta visual, ya que, si vemos ciertas letras, vamos a poder relacionarlas con el grupo-palabra. La lectura en voz alta también va a favorecer la ortografía, puesto que vemos todas las letras y asimilamos cómo se escriben las distintas palabras.

    Escribir, también favorece la ortografía, pero es muy importante corregir primero dicho texto para poder aprender bien esa palabra, por ello hay que seguir el siguiente esquema:
    1. Pensar qué escribir y cómo
    2. Anotar las primeras ideas
    3. Elegir una idea
    4. Realizar un esquema previo
    5. Elaborar una primera redacción
    6. Llevar a cabo una lectura en voz alta para ver los errores
    7. Corregir dichos errores, con ayuda del profesor
    8. Pasar el escrito a limpio, libre de errores.
    En cuanto a la semántica, esta se entiende como el estudio del significado, así como el estudio de los signos lingüísticos, es decir, atiende tanto al vocabulario como a frases hechas, metáforas, construcciones diversas, etc.
    La manera en la que se ha de enseñar en la escuela es mediante modelos comunicativos, es decir, contextualizando las palabras, ya sea dentro de sintagmas, frases o textos, para ello hay que:
    • Consolidar lo ya aprendido
    • Corregir los posibles errores que pueda cometer
    • Proporcionar estrategias a los niños para que puedan estudiar de manera correcta las diferentes palabras
    • Enseñarles el uso del diccionario
    • Ayudarles a percibir las diferentes connotaciones que pueden tener las palabras
    • Seleccionar las palabras más adecuadas para cada situación
    Para ambos casos, hay diferentes tipos de actividades que se pueden realizar con los niños, ya sean actividades de tipo convencional, como pueden ser relacionar palabras con la definición o el significado, ordenar palabras alfabéticamente, clasificar por familais léxicas; de tipo lúdico, como hacer crucigramas, sopas de letras, crear frases publicitarias, el ahorcado, relacionar palabras que rimen; contextualizado, como hacere un coloquio de un viaje, explorar el vocabulario de un recorte de prensa; mediante documentos reales, como el vocabulario que suscita una fotografía, un cartel, personas, objetos; o mediante constelaciones léxicas, es decir, ver una palabra y que de ella salgan más palabras relacionadas con este vocablo inicial, después, se irán desencadenando más palabras que esten relacionadas con estas últimas, etc.

    En este bloque hemos aprendido a realizar actividades para así mejorar, tanto la ortografía como la semántica de nuestros alumnos.
    En las prácticas pude ver como los alumnos tenían que copiar "x" veces las palabras en las que habían comentido alguna falta de ortografía, pero esta no es la solución, ya que, en el siguiente texto, probablemente las fallaban de nuevo y esto es porque no las han trabajado bien.
    Para ayudarles a mejorar cualquier aspecto, también podemos utilizar juegos o actividades más lúdicas, ya que, con estas, también podrán aprender y además, su aprendizaje puede ser incluso mejor ya que lo están llevando a cabo a la par que disfrutan y se divierten. No tenemos que dejar de lado los juegos entre los compañeros o con la clase entera por miedo a que se convierta en un caos ya que, de esa manera, conseguiremos que aprendan incluso sin darse cuenta de que lo están haciendo.

    BLOQUE 5: Morfología y sintáxis

    En este bloque, hemos profundizado acerca de uno de los niveles de la gramática. Aunque primero tenemos que recordar que, la gramática se ocupa de aquellas reglas que establecen el uso de las lenguas y de la organización de las palabras dentro de las oraciones. 
    El nivel de la gramática que trataremos en este bloque, será el sintáctico- morfológico, denominado también morfosintáxis. La sintaxis nos dice qué funciones desempeñan las palabras. La morfología y la sintaxis no se pueden trabajar de manera separada, son interdependientes.

    Este tema también nos recuerda los elementos de la oración, comenzando por los dos principales, que son el sujeto, el ser u objeto del que se habla, y el predicado, lo que se dice del sujeto.
    La palabra más importante del sujeto, es el núcleo, el cual suele ser un sustantivo o un pronombre. En cuanto al predicado, su núcleo es un verbo y es la parte más importante de la oración.

    Dentro del predicado nos podemos encontrar con diferentes elementos, los cuales pueden ser:
    • Complemento Directo: el cual nombra a la persona, animal o cosa sobre los que recae directamente la acción del verbo. Las maneras que tenemos de reconocer el CD es ver que concierde en número y persona con el verbo, sustituirlo por lo, la, los, las; pasar la oración a pasiva, el sujeto de la oración pasiva será el CD de la oración activa; y, por úlimo, preguntarle al verbo ¿qué? o ¿qué cosa?
    • Complemento Indirecto: es el complemento que nombra a la persona, animal o cosa sobre la que recae indirectamente la acción del verbo. Siempre va introducido por la preposión "a". La manera en la que podemos idenificar un CI es sustituyéndolo por le, les o preguntándole al verbo ¿a quién?
    • Complementos circunstanciales: son aquellos que señalan las circunstancias en las que tiene lugar la acción del vero. Dependiendo de la circunstancia, pueden ser de tiempo, lugar, compañía, modo, instrumento, causa, finalidad, destinatario o cantidad.
    • Atributo: es el complemento propio de los predicados nominales.
    • Complemento predicativo: es un complemento paralelo al atributo de los verbos copulativos, pero aparece en verbos no copulativos. Se trata de un grupo adjetivo que concuerda con el núcleo del sujeto en género y número.
    • Complemento de régimen: es un complemento que viene introducido por una preposición, la cual es exigida por el verbo. Un complemento de régimen y un complemento directo no pueden coexistir en una oración.
    • Complemento agente: es el complemento propio de la oración pasiva, viene introducida por la preposición "por".
    Es importante que enseñemos de una manera adecuada a nuestros alumnos la forma correcta de analizar una oración, siguiendo los pasos adecuados para ir localizando poco a poco cada elemento que aparece en la oración. Los pasos a seguir son los siguientes:
    1. Localizar el verbo de la oración y ver cuántos verbos hay. Esto nos dirá cuántas oraciones tenemos.
    2. Distinguir el número y la persona del verbo y ver qué palabra de la oración concuerda con el verbo.
    3. Distinguir el sujeto del predicado y sus núcleos.
    4. En el sujeto, además de ver el núcleo, veremos cuántos complementos hay y cuáls son. Esto también lo realizaremos con el predicado.
    5. Ver qué complemento puede ir en ese sintagma, para ello, tendremos que tener en cuenta el siguiente esquema:
    Sustantivo:
    • Semánticamente: Clase de palabras que sirven para nombrar personas, animales o cosas.
    • Morfolóficamente: Clase de palabras compuestas por lexema y morfema de género y número.
    • Sintácticamente:
      • Núcleo del sintagma nominal: Sujeto, Complemento Directo, Complemento Circunstancial de Tiempo y Lugar, Atributo, Aposición, Vocativo.
      • Con preposición: Complemento Directo (a), Complemento Indirecto (a/ para), Complemento de Régimen (de), Complemento Agente (por), Complemento Circunstancial, Complemento del Nombre (de).
    Pronombre:
    • Semánticamente: Clase de palabra que sustituye al nombre.
    • Morfológicamente: Clase de palabras compuesta por lexema y morfema de género y número. En el caso de los pronombres personales, también tiene caso, es decir, varían según la función que cumplan.
    • Sintácticamente:
      • Núcleo del Sujeto, Complemento Directo, Complemento Indirecto, Vocativo, Complemento Circunstancial de Compañía.
      • Con preposición: Complemento Directo (para), Complemento Indirecto (a/ para), Complemento Agente (por), Complemento de Régimen (de),  Complemento Circunstancial, Complemento del Nombre (de) 
    Verbo.
    • Semánticamente: Clase de palabras que se refiere a una acción o una pasión en un tiempo determinado.
    • Morfológicamente: Formada por raiz y desinencia verbal de persona, número, tiempo, modo, voz; y como excepción, hay género, pero sólo en formas compuestas (participio). Las formas personales no pueden funcionar nunca como núcleo del predicado, el infinitivo funciona como sustantivo verbal, el participio, como adjetivo verbal y el gerundio como adverbio verbal.
    • Sintácticamente: Núcleo del predicado.
    Adjetivos.
    • Semánticamente: Clase de palabra que describe y aporta una cualidad al sustantivo al que acompaña.
    • Morfológicamente: Formada por lexema y morfema de género y número.
    • Sintácticamente:
      • Sujeto: Adyacente
      • Predicado: Atributo, Núcleo del Sintagma Adjetival, Complemento Predicativo
    Adverbios.
    • Semánticamente: Clases de palabras que aportan circunstancias (lugar, tiempo, modo, cantidad...) al verbo.
    • Morfológicamente: Son invariables, excepto los adverbios terminados en -mente.
    • Sintácticamente: Núcleo del sintagma adverbial, Complemento Circunstancial, Intensificador.
    Determinante.
    • Semánticamente: Clase de palabras que acompañan al sustantivo y le aportan significado de distancia, posesión, cantidad...
    • Morfológicamente: Formado por lexema y morfema de género y número.
    • Sintácticamente: Determinante.
    Preposición.
    • Semánticamente: Clase de palabras que aportan significado de pertenencia, esencia, lugar, distancia...
    • Morfológicamente: Son invariables.
    • Sintácticamente: Enlace.
    Conjunción.
    • Semánticamente: Sirven de relación entre oraciones o palabras de la misma clase, aportándoles aspectos de unión, adversidad, causalidad, etc.
    • Morfológicamente: Son invariables.
    • Sintácticamente: Nexo
    Interjección.
    • Semánticamente: Expresa estado de ánimo o capta la atención.
    • Morfológicamente: Son invariables.
    • Sintácticamente: Oración
    En este bloque he podido aprender que, la morfología y la sintaxis pueden llegar a ser más divertidas y motivadoras para los niños, para ello debemos buscar también diferentes actividades y juegos lúdico- didácticos que nos ofrecen diferentes webs y aplicaciones, con las que los alumnos podrán motivarse más y adquirir un aprendizaje más significativo de aquello que les queramos enseñar, mediante los juegos.
    En las prácticas, realicé un con ellos una actividad de repaso de análisis morfosintáctico en la que tenían que inventar, moverse, cambiarse de sitio, buscar a su grupo... Que estuviesen moviéndose constantemente, no implicaba que no estuviesen aprendiendo, sino que lo estaban haciendo a la par que se divertían. Y esto lo reafirmé cuando, un niño que era su segundo año en sexto y que además, no le gustaba la sintáxis, me dijo que había sido la clase más divertida que había tenido. 
    Esa experiencia, junto con la de las actividades vistas a lo largo de este bloque, me han hecho darme cuenta de que tenemos en el juego una importante herramienta a la que podemos acudir para enseñar, la pena es que no sabemos usarla.


    CONCLUSIÓN FINAL

    ¿Por qué no me lo explicaron así en el colegio? 

    Esa es la pregunta que me ha acompañado durante toda esta asignatura, ya que, durante su duranción, he aprendido cosas que debería haber simplemente recordado, y esto es debido a que no me las habían explicado bien y, por lo tanto, se me hacía un mundo poder entenderlas y aplicarlas correctamente. Por ello quiero mejorar, ser mejor que aquellos profesores que me lo "enseñaron" y lograr así, que mis alumnos puedan aprenderlo correctamente y que no se hagan esa pregunta cuando crezcan.

    Como ya dije en el bloque pasado, siempre me ha atraido la idea de dar clase de lengua y literatura en primaria, y ahora, me veo capaz de poder darla, ya que he podido aprender una gran cantidad de ejercicios que aplicar en clase para poderles enseñar los diferentes bloques que engloba la lengua castellana.

    Me gustaría poder sembrar en mis futuros alumnos, la semilla del interés por esta materia y el gusto por  ella; y que no tengan el pensamiento común hasta ahora, de que la lengua y, en especial, el análisis morfosintáctico, es difícil y un rollo, sino que, mediante el trabajo en clase, las actividades lúdico- didácticas y una buena explicación; puedan llegar a decir que no entienden a aquellos que dicen que es aburrido y difícil.

    Me ha gustado la metodología llevada a cabo en estas clases en las que, mediante los diferentes trabajos, nos acercábamos más a cómo será nuestro día a día en el futuro, y qué tipo de actividades tendremos que llevar a cabo con nuestros alumnos. Sé que, en numerosas ocasiones, podré recuperar estos trabajos y ponerlos en práctica en el aula y que, además, me servirán para lograr aquel objetivo que me proponga.

    Cuando me paro a pensar qué conocimientos tenía antes de empezar esta asignatura y cuáles tengo ahora, veo todo lo que he aprendido y, me doy cuenta de que me llevo una maleta llena de conocimientos, aprendizajes, actividades, juegos, etc. que antes no me imaginaba que pudiese hacer; una maleta que, debido a lo ameno y entretenido que ha sido, apenas me doy cuenta de llevarla.

    Que esta asignatura se termine, no quiere decir que se termine también mi aprendizaje con respecto a la lengua, sino que seguirá alimentándose y creciendo día tras día.



    BIBLIOGRAFÍA Y WEBGRAFÍA